Llegada el 13 de diciembre a las 20.00 hora local a Lima (Perú) de cinco de las seis mujeres acuáticas y el jefe de expedición. Itiziar Abascal, nuestra sexta aguadora, fue retenida en Tenerife por obligaciones profesionales.
Sin apenas tiempo para recuperarnos, salimos el miércoles a las 8 de la mañana hacia el liceo franco-peruano de Lima para reunirnos con los niños de infantil, primaria y secundaria. Durante 4 horas, el equipo se reunió con algo más de 300 niños en el marco de las acciones preventivas de deporte y salud desarrolladas por la asociación HOPE TEAM EAST. Es una oportunidad para hablarles de la importancia de la actividad física y el deporte, de cuidarse y comer bien para sentirse bien en cuerpo y mente. Gracias a la presentación de la expedición CAP OPTIMIST, las mujeres del agua también transmiten mensajes contundentes como
la importancia de creer en uno mismo y en sus sueños
Demostrarles que nada es imposible gracias a la perseverancia, el espíritu colectivo y la superación personal (valores fuertes de la asociación).
Segundo plato fuerte de la semana, la conferencia de prensa de la expedición CAP OPTIMIST el jueves 15 de diciembre de 2022 en la Alianza Francesa de Lima. Gracias al apoyo de los servicios de la Embajada, y en particular de Christelle, la responsable de prensa, organizamos una rueda de prensa para los medios de comunicación peruanos y franceses gracias a un sistema de streaming. Tras la rueda de prensa, los remeros y Alexandra realizaron varias entrevistas en español. Esto fue objeto de muchas risas, especialmente con el famoso «Feliz Navidad» al final de una entrevista con Manu :).
El viernes 16 de diciembre partimos, con cierta aprensión, hacia INEN (Instituto Nacional de Enfermedades Neuroplásticas, incluido el cáncer) para conocer a los niños sometidos a quimioterapia. El viaje scout del año pasado nos preparó un poco para lo que íbamos a vivir, pero todos estábamos lejos de imaginar la situación actual del cáncer infantil en Perú. Nos reciben la jefa de oncología pediátrica del hospital y sus equipos. Nos acompaña nuestro socio NEWREST (con una importante filial en Perú). Nadie habla por los pasillos, todos tenemos una sonrisa de amor por estos niños, sus familias y la profesión médica, de compasión porque vemos situaciones muy tristes, pero también y sobre todo de orgullo porque nuestro proyecto una vez más tiene sentido y ¡sabemos por qué remamos!
Casi 2 horas con 50 niños del pabellón, en tratamiento. Dos horas en las que les ofrecemos regalos amablemente donados por nuestros socios LOCAMOD, AVENE, QUIKSILVER, la Fundación Deporte para la Vida, la Fundación Princesa Charlene de Mónaco y Newrest. Dos horas de sonrisas, risas, intercambios con los niños, sus madres, sus hermanos…
Los médicos nos hablan de la delicada situación de la mayoría de las familias, a menudo procedentes de provincias con niños con cánceres muy avanzados, tumores muy desarrollados. También nos cuentan que a menudo los niños son abandonados por sus padres debido a la carga social y económica que supone la enfermedad. Las madres nos cuentan que sus maridos se marcharon cuando se anunció la enfermedad.
Nos vamos de este momento, seguramente con muchas lágrimas corriendo, pero con el profundo deseo de seguir ayudándoles, y con la íntima convicción de haberles devuelto una sonrisa y la felicidad por el tiempo de un momento Optimista. Luego llegó el momento de volver a los trámites administrativos, las urgencias ligadas al contexto del país, a su funcionamiento aduanero, que a veces nos desbordaban.
También fue el momento de reunirnos con nuestras familias que habían viajado para las celebraciones de fin de año. 8 días de convivencia en familia para descubrir Perú, su cultura, la amabilidad de los peruanos, el famoso Ceviche y la forma de conducir ¡absolutamente sin regla!
// Para ponerlo en contexto, llegamos en pleno golpe de Estado en Perú, el día antes de que se declarara el estado de emergencia y con mucho estrés e incertidumbre por parte de nuestros socios locales. Gracias al trabajo codo con codo con la Embajada en particular, pudimos mantener todas nuestras acciones previstas sobre el terreno, respetando todas las medidas de seguridad que se habían establecido, sin poner en peligro al equipo y con la firme voluntad de mantener nuestras acciones en beneficio de los niños.//
Ayúdanos a mantener vivo el programa Super Optimist
¡Haga una donación comprando los kilómetros de la expedición!
1 Km = 100 euros *
¡o donaciones gratuitas!
Por ejemplo: si doy 100* euros mi donación se divide de la siguiente manera
*60 € dedicados al programa Super Optimist (niños enfermos) y a programas educativos de prevención del deporte y la salud en las escuelas + 40 € dedicados a la expedición deportiva, médica y científica.